La asistencia a familias de la ciudad por la compleja situación socioeconómica que vive el país se ha duplicado respecto del año pasado.
Así lo confirmó la subsecretaria de Promoción Social, Paola Barros, al indicar que “en el primer semestre del año pasado, la cantidad de personas asistidas que teníamos era del 10 por ciento de la población. Ahora es del 20 por ciento con lo cual el aumento ha sido muy significativo”.
“Esto se tradujo en el incremento, por ejemplo, de los módulos alimentarios que de 2.500 que teníamos en 2018 pasamos a 6.000 en este año”, agregó la funcionaria.
Barros sostuvo que “además no se trata de la cuestión alimentaria solamente ya que esta situación de pobreza que tenemos se refleja en otros índices como los de la salud, la educación y entonces el cuadro de vulnerabilidad es bastante complicado”.
Consultada sobre otros índices que aumentan esa vulnerabilidad, dijo que “uno de los indicadores que también se incrementó mucho tiene que ver con la vivienda ya que se han incrementado los pedidos de familias de una ayuda económica para poder pagar el alquiler y eso hace que muchos, por priorizar la vivienda, no paguen la luz o el gas y después recurran nuevamente al Municipio ante la inminencia del corte de alguno de estos servicios”.
