Los representantes de la Asociación del Personal Aeronáutico fueron recibidos por los concejales, y les plantearon los serios problemas que ocasionará el cambio de horario para los vuelos que unen Río Grande con Buenos Aires oficializado por Aerolíneas Argentinas. Los trabajadores señalaron que se busca vaciar a la aerolínea de bandera para beneficiar a las lowcost. También insistieron sobre la necesidad de contar con otra autombomba, tantas “veces anunciadas, y que nunca llegó”. Además resaltaron que la “plataforma está rota, y plantearon los inconvenientes que puede causar una pista congelada en el aterrizaje del avión”.
Integrantes de la Asociación del Personal Aeronáutico en Río Grande, asistieron ayer al Concejo Deliberante para transmitir, a los Concejales, los perjuicios e inconvenientes que tendrán los ciudadanos de Río Grande a la hora de viajar por Aerolíneas Argentinas a partir de la decisión que tomó la empresa de que el Aeropuerto local opere en horas nocturnas y disponer que la frecuencia a esta ciudad sea efectuada por aviones de menor porte y menos capacidad.
Luis Márquez, representante de la entidad gremial, durante la reunión expresó que la decisión de Aerolíneas Argentinas responde a un interés del Gobierno nacional de “achicar” la empresa, con la finalidad de que otros operadores tomen las rutas de la aerolínea de bandera, aunque advirtió que en esta oportunidad “todos los sindicatos estamos muy unidos y no vamos a permitir que vacíen la empresa, o la quieran privatizar o vender”.
Sin embargo remarcó que la decisión de la empresa ya fue “oficializada y que el programa de vuelos para julio ya está vigente e incluso nos dijeron que la idea es dejarla así porque quieren que los aviones Embraer vuelen mañana, tarde y noche, dejar lugar en la plataforma de aeroparque para las empresas lowcost ante la imposibilidad de utilizar la base aérea de El Palomar”.
Asimismo entendió que sí estas empresas “tienen mejor posición en Aeroparque, van a tener mejor posición en el mercado”.
Por lo tanto remarcó la necesidad de “concientizar a toda la sociedad sobre esta situación en la que tenemos que estar todos juntos”, dijo, al tiempo que expresó el “convencimiento de que si toda la clase política reclama en conjunto se va a poder revertir la decisión de la empresa”.
Además Márquez opinó que la solución sería “la bendita autobomba que no llega nunca, porque si la tuviéramos podrían levantar la categoría del aeropuerto, entrarían los aviones de 160 plazas con mejores tarifas; más bodegas; mejores horarios”.
Incluso reveló que se podrían dejar también los aviones Embraer “si estuviera en condiciones el aeropuerto de noche, dado que hace años el mantenimiento de plataforma, calle y rodaje, lo hacía la marina con máquinas importantes, en la actualidad le dan un plus, en negro, a nuestros compañeros de mantenimiento, hacen ese trabajo, lo hacen con un rodillo que lo tiran con un tractor viejísimo, y después una tolva con urea pero la urea para que trabaje hay que tirarla en tiempo y forma”.
Reveló que esto podría “implicar un riesgo para las aeronaves cuando la pista esté congelada y la urea no sea tirada a tiempo o incluso cuando los pasajeros descienden del avión”.
Además recordó que “la plataforma esta toda rota, se llena de agua, y cuando el avión entra sale agua de abajo, por lo que los muchachos de mantenimiento tienen que hacer un trabajo precario porque no tienen elementos y cumplen su horario”.
La autobomba que nunca llegó
Además hizo hincapié en la falta de un autobomba que se prometió muchas veces pero que sin embargo nunca llegó a Río Grande porque al “parecer se perdió en el camino”, relató irónicamente.
Razón por la cual insistió en que la “autobomba generaría una solución dado que “elevarían la categoría del aeropuerto y permitiría que puedan llegar aviones de mayor porte”.
Incluso indicó que “tendrían que poner un mantenimiento acorde a lo que necesitamos en el invierno porque con un autobomba y una limpieza de la pista precario estamos en la misma, y Aeropuerto Argentina 2000 dice que no le da el Presupuesto”.
También reveló que “en caso de que llegue el autobomba quizás sea necesario capacitar al personal para operarla, pero eso sería lo de menos porque lo más importante es el autombomba, dado que cuando Aerolíneas envía el avión 800 le paga un dinero importante a Bomberos Voluntarios para que vayan a hacer el apoyo para el aterrizaje”.
Puntualizó que en “seguridad tenemos que estar muy orgullosos de nuestra línea de bandera y de nuestros pilotos porque estamos entre las 10 primeras empresas en el mundo” en esta materia.
El ILS politizado
Márquez pidió además “no politizar el tema” dado que “con el ILS pasaron muchas personas y una persona de Ushuaia (en obvia referencia al actual diputado Héctor Tito Stefani) vino, se sacó una foto y a todos nos molestó mucho eso porque muchos diputados, senadores, empresarios, gerentes, y mucha otra gente gestionó el bendito ILS que nunca llegaba, hasta que un buen día llegó, y apareció uno para sacarse una foto, después de que pasamos muchos años pidiéndolo”.
Por otra parte reveló que dialogó con la Gobernadora que “me escuchó y le transmitió al señor Eposto para que se comunique con Aerolíneas Argentinas, yo después lo chequeé por otro lado, habían estado en comunicación, y aseguró que fue durante la última visita del ministro Frigerio”.
También mencionó que le transmitió la misma preocupación al Intendente de Río Grande, al legislador Pablo Blanco, y al diputado Martín Pérez.
Márquez insistió en la unidad de los gremios e incluso “le han presentado varias denuncias al Ministro de Transporte porque las audiencias públicas las han hecho entre gallos y medianoche, perjudicando a Aerolíneas Argentinas y Austral, porque es algo muy evidente, y ahora dicen que está autorizada a volar a Río Grande la empresa del Presidente”.
Finalmente Márquez ilustró la pérdida de plazas y cargas que se perderían con las modificaciones señalando que “con el avión Embraer de 96 plazas, equipaje y carga 2200 kilos, con el avión 800 hay 160 plazas y 4000 kilos de equipaje y carga, el avión 700 que viene a la tarde 128 plazas y 3000 kilos de carga”, por lo cual perjudica el transporte de “todo lo que viene para banco; carga internacional; vacunas; mascotas; féretros; etc.” a lo que se suma “personas derivadas; personas con discapacidad; tratamientos; urgencias; contingente de estudiantes; deportistas; espectáculos; recitales; etc.
“La idea es enviar un petitorio a la ANAP”
La concejal Verónica González, por su parte, expresó que la intención del Concejo Deliberante es “expresarnos a través de una Minuta de Comunicación, aunque tenemos sesión la semana que viene, también enviar una petitorio a la ANAP, entregárselo a los diputados que también están haciendo un esfuerzo y también el pedido que hizo el Intendente”.
Por último la concejal Verónica González en oposición a lo planteado por los trabajadores opinó que “es una cuestión política”, dado que se trata de una “política pública del Gobierno nacional”.
Entendió que “se vuelve un problema de soberanía y de economía porque una plaza menos en la ciudad para poder volar significa menos soberanía, y más costo para quienes tienen que viajar a Ushuaia para viajar, y a eso hay que sumarle si el avión aterriza en Ezeiza”.
