“Son los últimos cartuchos, si no mejoramos ahora no nos veamos a los 70 años saltando en la puerta del PAMI por nuestros derechos, aprovechemos ahora que la sangre todavía nos corre fuerte por las venas”, señalaron en la convocatoria.
Y sostuvieron “hasta que no haya una respuesta concreta, hasta que el PAMI no nos atienda como nos merecemos, como cualquier ser humano, como veteranos de guerra, no nos vamos”.
Siguiendo con la consigna establecida a nivel nacional, el centro de excombatientes Malvinas Argentinas de la ciudad de Río Grande se hizo presente esta mañana en las oficinas locales del PAMI.
“Estamos haciendo un reclamo que es a nivel nacional, sabemos que en este tiempo que lleva el Gobierno Nacional se desequilibró en cuanto a salud de los veteranos y de tercera edad”, expresó Roma Alancay, presidente del Centro de Veteranos, en diálogo con FM Aire Libre.
“Vinimos a hacer presencia al PAMI a manifestarnos en contra de la política actual que lleva adelante el Gobierno con respecto a la salud; tenemos que salir a expresarnos”, añadió.
Alancay recordó que en la ciudad de Río Grande “tenemos el Sanatorio Fueguino que no está teniendo el convenio con PAMI veteranos, tampoco el Centro Integral Médico; cada vez se van achicando más las prestaciones y no lo debemos dejar pasar porque se trata de la salud. No tenemos un urólogo, también faltan médicos en ginecología y traumatología, hay médicos que no quieren tener convenio con PAMI porque son largos los tiempos para poder cobrar”.
En tal sentido agregó “sabemos que han fallecido a lo largo de estos años más de 60 compañeros en el país y nosotros debemos velar por nuestros compañeros, hoy nos sentimos bien, pero tenemos que velar por los compañeros que necesitan ser asistidos”.
“Nosotros reclamamos muy pacíficamente, sabemos que hay otros lugares en Buenos Aires donde han tomado las oficinas y no están prestando servicios, nosotros no quisimos perjudicar en esta situación a los abuelos que vienen a hacer trámites”, aclaró Alancay para finalizar.
Foto: Sofia Oviedo