El presidente del radicalismo fueguino, Federico Sciurano, candidato por el frente que conformará con el MPF y otros aliados, cifró expectativas en un mensaje contundente de las urnas contra la política nacional, que permita a la vez romper la hegemonía de la Legislatura, donde se ha avanzado sobre conquistas sociales.
Por Radio Provincia, dijo que espera “balancear fuerzas, ante el avance de políticas nacionales que están teniendo un gran impacto social”.
En el frente con el MPF se postulará a título personal y no como partido radical, porque “el radicalismo en forma orgánica es parte de Cambiemos”, dijo, aunque celebró el respaldo obtenido dentro de su partido, con “expresiones de sectores formales, del comité provincia, el comité Ushuaia, la OTR -organización de trabajadores radicales-, la gran mayoría de las juventudes provinciales, los delegados al comité nacional, y varios convencionales”, enumeró.
“La representatividad fue más que importante, pero la convención del partido resolvió que la UCR está en Cambiemos, más allá de que permite que los radicales que no nos sentimos contenidos por Cambiemos podamos participar de otro espacio”, afirmó, más allá del acta aclaratoria del 1 de junio, que sostiene lo contrario.
Con todas las condiciones dadas para que la alianza formal de la UCR lleve un candidato del PRO, Sciurano apuesta doblemente al respaldo de los radicales. “Hay un sector muy importante del partido que no comparte esa mirada y estamos muy comprometidos con nuestro plan de gobierno presentado en 2015, con UnirTDF”, sostuvo, ratificando que “tiene proyección para 2019. Estamos convencidos de que la realidad de la provincia se puede modificar, sin generar la vulnerabilidad social que estamos viendo en este momento”.
“Es muy importante que a partir de este año podamos generar un punto de inflexión en el equilibrio, la discusión y el debate serio”, propició, para torcer el rumbo nacional y su reflejo en la provincia.
Mencionó los proyectos enviados por la gobernadora con tratamiento de urgencia en enero pasado, “entre los que se encontraba la reforma a las pensiones RUPE. Había otros proyectos de ley también con un alto contenido social y, si no hubiera existido una reacción de parte de la comunidad, que generó que el gobierno levantase el tratamiento de urgencia en su momento, todos esos proyectos hoy serían ley, cuando muchos ni siquiera fueron tratados en la Legislatura”, observó.
Cargó contra las políticas nocivas del gobierno nacional que han impactado negativamente en Tierra del Fuego, y en especial puso la mirada sobre Río Grande, donde “el impacto es muy fuerte, con un nivel de desocupación y desempleo agravado por el efecto cascada, porque la gente que perdió su trabajo está generando una recesión importante, está haciendo que cierren comercios y mucha gente de la actividad mercantil pierda su trabajo”.
“Nosotros vivimos una situación similar en la década del ’90 -recordó-. Da la sensación de que a Ushuaia no nos toca, pero la experiencia nos dice que esto va a terminar llegando al resto de la provincia”, anticipó el dirigente.
“Tenemos que tener la capacidad de reaccionar y generar políticas activas para evitar que esto se siga profundizando”, expuso y cuestionó las decisiones intempestivas del macrismo, enmarcadas en una supuesta reconversión, que debió llevarse adelante de forma gradual. En este punto citó ejemplos en el mundo donde se cambió la matriz económica, pero “en un proceso de diez años”, como ocurrió con Australia y China.
“Australia viene de terminar un proceso de diez años para dejar de producir autos en su país. A partir de un convenio firmado con China, diez años atrás, Australia generó una serie de herramientas en conjunto con China para poder mantener un statu quo con respecto a la gente que vive de la fabricación de autos. A lo largo de diez años, sin cambiar el statu quo y sin que la gente pierda nivel adquisitivo, cambiaron toda la matriz económica vinculada con acuerdos económicos firmados con China”, detalló.
“Cuando uno quiere hacer un cambio, se hace de esa manera, no se levanta un día, firma un decreto y que cada uno se acomode, a partir de la ley de la selva. Está faltando la seriedad que debe tener un tema de estas características, que no es un tema político partidario, sino un tema de una alta connotación social, estructural y de desarrollo económico”, subrayó.
Las coincidencias con Melella
Consultado acerca de si lo desilusiona que Melella se haya ido a otro frente, en lugar de sumarse al proyecto, como Paulino Rossi, respondió que “para nada. Acá tenemos que darnos cuenta de la posibilidad que tenemos de construir un lugar mejor. Eso se hace respetando la mirada que cada uno tiene, pero también dándonos cuenta de que, cuando llega el momento, hay que concentrarnos en los acuerdos y en la construcción común que tenemos”.
“En estos últimos años siempre tuve una buena relación con Gustavo, más allá de que no hayamos compartido un espacio político común. Sin duda es un dirigente que hoy administra una de las ciudades más importantes de la provincia y me parece muy importante que podamos mantener siempre un buen vínculo y una buena relación, como lo hicimos incluso cuando Gustavo acompañó otro proyecto político. Esto nunca nos generó ningún conflicto personal, porque siempre hemos mantenido una relación de respeto. Por eso no genera nada negativo el hecho de que él sea parte de un sector donde se siente cómodo, como yo lo hago en un sector donde me siento cómodo”, dijo.
Anticipó acciones conjuntas, dado que el posicionamiento partidario “no va a evitar que el día de mañana podamos defender la ciudad de Río Grande de manera conjunta e incluso sumando esfuerzos. El hecho de que podamos coincidir en cuestiones que tienen un alto valor para mucha gente que está mal y preocupada, es una garantía de que en algún momento las cosas van a cambiar- Yo tengo fe en que las cosas van a cambiar, porque la nuestra es una provincia que sigue manteniendo una posibilidad de desarrollo única, con todo lo que le ha pasado”, expresó.
Finalmente Sciurano dijo que aspira a consolidar un proyecto de provincia, más allá del 2017: “Tengo la expectativa de que en 2019 ese proyecto pueda contener el nivel de demanda que tenemos muchos de los que vivimos en Tierra del Fuego”, concluyó.
