Fabiana Ríos había viajado desde Ushuaia a Pérez, Santa Fe, para el entierro de la abuela de sus hijas y terminó viviendo una pesadilla. Denunció pésima atención del 911.
Fue un momento de tensión que parecía sacado de la película Relatos Salvajes, pero no era ficción, todo lo contrario. Un viaje de miles de kilómetros para ir al cementerio a despedir a la abuela de sus hijas, lluvia intensa, el GPS que las lleva a un camino desértico, el auto que se atasca y de repente disparos. Todos esos elementos tuvo el crudo relato que realizó anoche la ex gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos, al revelar que desconocidos balearon el auto en el que circulaba con sus dos hijas en la provincia de Santa Fe, durante un confuso episodio ocurrido el pasado sábado.
Ríos, que gobernó durante 8 años la provincia más austral del país, contó que uno los disparos hirió en la pierna a su hija mayor, de 27 años, quien después recibió atención médica, aunque se constató que no había sufrido lesiones de gravedad. Todo después de visitar el cementerio El Prado de la localidad santafesina de Pérez.
"Eran las 13 cuando salimos del cementerio con mis hijas. Como no sabíamos qué ruta tomar usamos el GPS del teléfono, que nos dirigió hacia una zona rural, con muy pocas viviendas. El camino se hizo de tierra, llovía mucho y el auto se atascó", contó Ríos en su cuenta de Facebook.